lunes, 14 de enero de 2008



¿INOCENTE O CULPABLE?



Hoy Lucas está en boca de todos. Para bien o para mal, y casisiempre es más para mal.


La semana pasada en una entrevista el mister blanquinegro al ser preguntado por el recorte en el presupuesto para fichajes contestó que cuando él firmó ese recorte no existía.


Es curioso cómo se puede decir todo sin decir nada.


Nuestro gran Maestro le agrarró fuerte al ritmo de la canción del verano y a la hora del qué hay de lo mío y mis fichajes le llevó a su especialidad: la milonga.


Ese fue el gran fallo de Lucas, seguir agarrado y continuar el tango a pesar de que se la habían metido doblada.


También hay que comprender que era una oportunidad única la de volver a entrenar al Burgos y relanzar su currículum en una Burgatti que año sí y año también se metía en Play Off.


Se pueden hacer equipos muy apañados sin necesidad de un gran presupuesto como pasó la temporada de Fede Castaños pero lo más normal es que el presupuesto y la calidad de los futbolistas sean dos conceptos directamente proporcionales.


Ahora es cuando Lucas ya no se casa con nadie. Ni con su Presidente como demostró en la entrevista la pasada semana ni con sus jugadores como hizo el domingo al cambiar a Guembe.
Y algunos miembros de la directiva ya piden la cabeza del técnico de Gamonal.


La plantilla de esta temporada es más bien flojita, para deambular por mitad de la tabla.Pero con los árbitros y entrenadores no nos damos cuenta que también son de Segunda B.


Aquí no hay Juandes, Mourinhos ni Schusters.


Y al igual que los jugadores fallan garrafalmente, los entrenadores también.


Mi opinión personal es que no hay que cesar a Lucas, quizá no tenga elementos de juicio suficientes por cuanto no he podido ver los últimos partidos, pero yo creo que cargarse a Lucas sería un error.


No ya por el desembolso económico de pagarle el finiquito de esta temporada ( por contrato, si se le cesa sólo se le paga una temporada no las dos que tiene firmadas) y fichar a un nuevo entrenador, sino porque ahora es el momento de no ponernos nerviosos ya que nos puede pasar como a esos equipos que sin estar en descenso destituyen al entrenador y resultó peor el remedio que la enfermedad.

Me viene a la cabeza el Real Oviedo el año pasado o el Real Club Celta de Vigo de Fernando Vázquez.

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